Los perros de la brigada policial realizan labores de rescate y búsqueda
BRIAMEL GONZÁLEZ ZAMBRANO
EL UNIVERSAL
BRIAMEL GONZÁLEZ ZAMBRANO
EL UNIVERSAL
Caracas, jueves 18 de enero, 2007
Un custodio especial controla, desde hace 11 años, la cola en la venta de boletos para los juegos entre Leones del Caracas y Navegantes del Magallanes.
Cuando el partido llega al noveno inning, sus ojos vigilan una de las salidas para evitar trifulcas. Se trata de Patrulla, un pastor alemán entrenado en la Brigada Canina de la Policía Metropolitana (PM) que pertenece a la Dirección de Orden Público.
Ya con los bigotes blancos, Patrulla va pasando el testigo de sus labores a sus hijos Preli, Pantro y Nikita, que se ubican en las gradas para controlar a los aficionados con sus miradas y salivación agitada.
Estos animales se suman a otros 48 canes que han sido adiestrados por un equipo de 80 efectivos adscritos a la cuadrilla especial. Entre los actos cotidianos que realizan los perros figuran el hallazgo de alijos de drogas, rescate de personas perdidas y captura de carteristas.
Tanto el ingreso como el entrenamiento de los policías suponen un proceso largo y arduo, según contó el inspector José Centeno. "Los funcionarios deben tener 4 años de antigüedad y carecer de antecedentes. Tienen que hacer el curso intensivo de 8 meses para graduarse de guía can", explicó.
El programa de estudios para ser tutor del semoviente canino (término utilizado para describir al perro, que se mueve por sí mismo) consta de 3 partes: reseña histórica del animal, veterinaria y entrenamiento del funcionario para tratar a canes.
El entrenamiento se hace para diferentes actividades: rastreo de drogas, rescate y salvamento, explosivos y vigilancia.
"Son muy solicitados para los allanamientos cuando se sospecha la presencia de drogas o de lesionados o muertos", comentó Antonio Díaz, guía can de un golden que sólo atiende a los mandatos. "Son compañeros fieles. Si los atacas, se vuelven tu enemigo, de lo contrario te demostrarán apoyo incondicional", dijo Díaz.Procedimientos de aprendizaje
"No se les aplica electricidad, maltratos o represión. Les damos enseñanza a través del juego. Los entrenamos con pelotas y la recompensa no es golosina ni drogas sino una palmada para que sepa que está haciendo las cosas bien", explicó el sargento Miguel Noguera, quien tiene 9 años en la brigada.
Para que un perro ingrese al equipo debe tener entre 8 meses y 1 año de nacido y ser de las razas: pastor alemán, bóxer, golden retriever o rottweiler.
"El pastor es el más fácil de entrenar dada su inteligencia. Sabe rescate y defensa. El bóxer se utiliza para guía acompañante. El golden se adiestra rápido para ubicar estupefacientes porque desarrolla el olfato y el rottweiler es rescatista".
El costo de los animales oscila entre Bs 1,5 y hasta 7 millones. "Un can entrenado en obediencia, explosivos, droga y rescate tiene el máximo costo en el mercado. Nuestros animales tienen excelentes condiciones, comentó Centeno, quien reiteró que los métodos de entrenamiento respetan la salud mental y física de los perros.
Las salidas de los canes hacia operativos las determina el Ministerio del Interior y Justicia. Sin embargo, la brigada hace a diario exhibiciones y charlas antidrogas en colegios y universidades, previa solicitud de los interesados que pueden llamar a los números telefónicos (0212) 5512215 y 0414-1501220.
Los canes de la brigada han pasado los últimos días custodiando el bulevar de Sabana Grande, donde obedecen a sus guías cuando les piden que giren, se hagan los muertos, se sienten o busquen una pelotita, mientras los niños observan.
52 perros de diferentes razas forman la Brigada Canina de la PM y se consideran bienes del Estado.
140 dormitorios tiene la brigada ubicada en Cotiza. Allí se alojan funcionarios y canes
2 veterinarios realizan chequeos a los perros y asisten su reproducción junto a 4 enfermeros.
1979 Fue el año en que se creó la brigada. Los fundadores se formaron en Francia y EEUU.