Leyenda sobre el origen:
Cuenta la leyenda que la raza se inicia en 1858, cuando Sir Dudley Majoribanks, Primer Lord Tweedmouth, asistió a una función de un circo ruso que se encontraba instalado en Brighton (Gran Bretaña) y vio trabajando a un grupo de seis u ocho perros de manto amarillo, supuestamente rastreadores rusos, que era una antigua raza utilizada en el Cáucaso (Chechenia) como perros ovejeros.
A Sir Dudley Majoribanks le gustaron tanto esos perros y quedó tan favorablemente impresionado por su inteligencia y habilidad para realizar sus actos circenses, que decidió comprarlos y regresar con ellos a su casa en Grusachan (Escocia). Según la leyenda, en un principio Sir Dudley Majoribanks cruzó a los perros entre sí y luego con ejemplares de raza Bloodhound de pelaje claro y también con otros Retrievers ingleses. Se dice que de esa manera, surgió la raza.
También se ha dicho que en 1883 el coronel Le Poer Trench adquirió un ejemplar descendiente de esos canes originales, propiedad de un sobrino de Sir Dudley Majoribanks y viajó a Rusia con el propósito de obtener otro perro de similares características, que sin embargo no logró conseguir.
Esta leyenda nos cuenta en su trágico final, que los perros del coronel Le Poer Trench no lograron sobrevivir, debido a su decisión expresa de que cuando él muriera, todos sus ejemplares debían ser sacrificados.
Ambas versiones fueron desmentidas por Elma Stonex y el Sexto Conde de Ilchester, amantes, conocedores y estudiosos de la raza, quienes en la década de 1950 se dieron a la tarea de revisar documentos y viejos archivos de personajes ingleses del siglo XIX, con el propósito de fundamentar el verdadero origen de la raza Golden Retriever, el cual se resume en las líneas que siguen.
Historia de la raza:
Gracias al trabajo de personas como Elma Stonex y el Sexto Conde de Ilchester, se pudo comprobar que más allá de lo dicho en las leyendas, se trata de una raza que fue cuidadosamente planeada y sobre la cual comienza a documentarse registros de cría desde 1864, cuando Lord Tweedmouth adquiere a “Nous”. Cabe mencionar que Nous fue un ejemplar de raza Flat o Wavy Coated Terrier, de capa ondulada y amarilla, descendiente de padres negros, que se caracterizó por ser un nadador de gran resistencia. Los registros dicen que él fue cruzado con “Belle”, una hembra dulce y de temperamento muy estable de raza Tweed Water Spaniel, de pelo ondulado color hígado.
Como resultado de ese primer apareamiento nacieron cuatro cachorros, todos amarillos, tres hembras de nombre “Cowslip”, “Ada” y “Primrose” y un macho llamado “Crocus”. A partir de estos cuatro perros, Lord Tweedmouth decidió fijar de manera conjunta, las características positivas aportadas por sus progenitores tales como: resistencia, excelencia en el nado, dulzura y carácter muy estable. Actualmente estos cuatro ejemplares son considerados los verdaderos fundadores de la raza Golden Retriever
De ellos, Lord Tweedmouth cedió a “Ada” al Conde de Ilchester y a “Crocus” al Segundo Lord Tweedmouth, conservando con él a “Primrose” y a “Cowslip”. Esta última fue tomada como base para su programa de crianza. Ella fue apareada primero con un perro de raza Tweed Water Spaniel conocido como “Tweed” y luego con un Setter Irlandés rojo llamado “Sampson”. El propósito de estos cruces era mejorar el color y la capacidad olfativa de sus descendientes
En las siguientes generaciones Lord Tweedmouth también empleó a dos perros de raza Flat Coated Retriever, llamados “Sambo” y “Tracer”, quienes fueron cruzados con dos hembras descendientes de “Cowslip”, ellas son “”Topsy” y “Gill II”, respectivamente.
En ese sentido, Lord Tweedmouth es considerado actualmente un pionero en el campo de la genética, ya que realizó apareamientos dentro de una misma línea, tal es el caso de “Jack” con su sobrina “Zoe” y luego de “Queenie” con su tío “Nous II”, lo cual era absolutamente inusual en su tiempo. El principal objetivo con dichos cruces fue tratar de reunir en un solo perro, todas las características deseadas para el cobro de piezas de caza en el agua y matorrales. De esa forma se fueron sentando las bases del Golden Retriever que hoy conocemos.
La historia queda documentada hasta el año 1889, siendo “Prim” y “Rose” las últimas dos cachorras que aparecen anotadas en los libros de registros de Lord Tweedmouth, por las siguientes razones: su fallecimiento en 1892, la falta de continuidad de anotaciones de cruzas y la venta de las perreras de Grusachan en 1905.
Sin embargo, el eslabón perdido para enlazar a Lord Tweedmouth con los Golden Retriever de hoy, aparece finalmente en una carta encontrada entre las pertenencias de su pariente Lady Pentland, que fue escrita por John Mc Lennan, cuidador de las perreras de Grusachan, donde manifiesta que había vendido al Primer Vizconde de Harcourt dos cachorros provenientes del encaste básico, hijos de “Lady”, que se asume desciende de “Prim” o “Rose”, las cuales fueron precisamente las últimas dos perras señaladas en los documentos de crianza llevados por Lord Tweedmouth.
Así pues, Sir Dudley Majoribanks, Primer Lord Tweedmouth es considerado hoy el gestor indiscutible de esta maravillosa raza, la cual es el resultado de apareamientos pensados que tenían como objetivo fijar determinadas características que él quería para sus “Retrievers Amarillos” (así llamados hasta 1920). En consecuencia, el surgimiento del Cobrador Dorado no fue producto de la casualidad –como se quiso hacer ver hace un tiempo- y sería una gran injusticia creer que salieron de un circo ruso, como si hubiesen sido sacados del sombrero de un mago.
Autores: Luis Roberto Zamora y Tatiana Gutiérrez, propietarios del Criadero El Candelillal
Wstminster 2006
Cuenta la leyenda que la raza se inicia en 1858, cuando Sir Dudley Majoribanks, Primer Lord Tweedmouth, asistió a una función de un circo ruso que se encontraba instalado en Brighton (Gran Bretaña) y vio trabajando a un grupo de seis u ocho perros de manto amarillo, supuestamente rastreadores rusos, que era una antigua raza utilizada en el Cáucaso (Chechenia) como perros ovejeros.
A Sir Dudley Majoribanks le gustaron tanto esos perros y quedó tan favorablemente impresionado por su inteligencia y habilidad para realizar sus actos circenses, que decidió comprarlos y regresar con ellos a su casa en Grusachan (Escocia). Según la leyenda, en un principio Sir Dudley Majoribanks cruzó a los perros entre sí y luego con ejemplares de raza Bloodhound de pelaje claro y también con otros Retrievers ingleses. Se dice que de esa manera, surgió la raza.
También se ha dicho que en 1883 el coronel Le Poer Trench adquirió un ejemplar descendiente de esos canes originales, propiedad de un sobrino de Sir Dudley Majoribanks y viajó a Rusia con el propósito de obtener otro perro de similares características, que sin embargo no logró conseguir.
Esta leyenda nos cuenta en su trágico final, que los perros del coronel Le Poer Trench no lograron sobrevivir, debido a su decisión expresa de que cuando él muriera, todos sus ejemplares debían ser sacrificados.
Ambas versiones fueron desmentidas por Elma Stonex y el Sexto Conde de Ilchester, amantes, conocedores y estudiosos de la raza, quienes en la década de 1950 se dieron a la tarea de revisar documentos y viejos archivos de personajes ingleses del siglo XIX, con el propósito de fundamentar el verdadero origen de la raza Golden Retriever, el cual se resume en las líneas que siguen.
Historia de la raza:
Gracias al trabajo de personas como Elma Stonex y el Sexto Conde de Ilchester, se pudo comprobar que más allá de lo dicho en las leyendas, se trata de una raza que fue cuidadosamente planeada y sobre la cual comienza a documentarse registros de cría desde 1864, cuando Lord Tweedmouth adquiere a “Nous”. Cabe mencionar que Nous fue un ejemplar de raza Flat o Wavy Coated Terrier, de capa ondulada y amarilla, descendiente de padres negros, que se caracterizó por ser un nadador de gran resistencia. Los registros dicen que él fue cruzado con “Belle”, una hembra dulce y de temperamento muy estable de raza Tweed Water Spaniel, de pelo ondulado color hígado.
Como resultado de ese primer apareamiento nacieron cuatro cachorros, todos amarillos, tres hembras de nombre “Cowslip”, “Ada” y “Primrose” y un macho llamado “Crocus”. A partir de estos cuatro perros, Lord Tweedmouth decidió fijar de manera conjunta, las características positivas aportadas por sus progenitores tales como: resistencia, excelencia en el nado, dulzura y carácter muy estable. Actualmente estos cuatro ejemplares son considerados los verdaderos fundadores de la raza Golden Retriever
De ellos, Lord Tweedmouth cedió a “Ada” al Conde de Ilchester y a “Crocus” al Segundo Lord Tweedmouth, conservando con él a “Primrose” y a “Cowslip”. Esta última fue tomada como base para su programa de crianza. Ella fue apareada primero con un perro de raza Tweed Water Spaniel conocido como “Tweed” y luego con un Setter Irlandés rojo llamado “Sampson”. El propósito de estos cruces era mejorar el color y la capacidad olfativa de sus descendientes
En las siguientes generaciones Lord Tweedmouth también empleó a dos perros de raza Flat Coated Retriever, llamados “Sambo” y “Tracer”, quienes fueron cruzados con dos hembras descendientes de “Cowslip”, ellas son “”Topsy” y “Gill II”, respectivamente.
En ese sentido, Lord Tweedmouth es considerado actualmente un pionero en el campo de la genética, ya que realizó apareamientos dentro de una misma línea, tal es el caso de “Jack” con su sobrina “Zoe” y luego de “Queenie” con su tío “Nous II”, lo cual era absolutamente inusual en su tiempo. El principal objetivo con dichos cruces fue tratar de reunir en un solo perro, todas las características deseadas para el cobro de piezas de caza en el agua y matorrales. De esa forma se fueron sentando las bases del Golden Retriever que hoy conocemos.
La historia queda documentada hasta el año 1889, siendo “Prim” y “Rose” las últimas dos cachorras que aparecen anotadas en los libros de registros de Lord Tweedmouth, por las siguientes razones: su fallecimiento en 1892, la falta de continuidad de anotaciones de cruzas y la venta de las perreras de Grusachan en 1905.
Sin embargo, el eslabón perdido para enlazar a Lord Tweedmouth con los Golden Retriever de hoy, aparece finalmente en una carta encontrada entre las pertenencias de su pariente Lady Pentland, que fue escrita por John Mc Lennan, cuidador de las perreras de Grusachan, donde manifiesta que había vendido al Primer Vizconde de Harcourt dos cachorros provenientes del encaste básico, hijos de “Lady”, que se asume desciende de “Prim” o “Rose”, las cuales fueron precisamente las últimas dos perras señaladas en los documentos de crianza llevados por Lord Tweedmouth.
Así pues, Sir Dudley Majoribanks, Primer Lord Tweedmouth es considerado hoy el gestor indiscutible de esta maravillosa raza, la cual es el resultado de apareamientos pensados que tenían como objetivo fijar determinadas características que él quería para sus “Retrievers Amarillos” (así llamados hasta 1920). En consecuencia, el surgimiento del Cobrador Dorado no fue producto de la casualidad –como se quiso hacer ver hace un tiempo- y sería una gran injusticia creer que salieron de un circo ruso, como si hubiesen sido sacados del sombrero de un mago.
Autores: Luis Roberto Zamora y Tatiana Gutiérrez, propietarios del Criadero El Candelillal
Wstminster 2006
2007