19.9.06

Antioxidantes: qué son y qué papel juegan en la nutrición

Fuente: http://www.Vetpunta.com
El interés por combatir el envejecimiento físico constituye una obsesión para muchas personas que se niegan a aceptar el paso del tiempo y sus efectos: tratamientos quirúrgicos, cremas milagrosas, medicamentos poco fiables, etc. En los últimos años, la preocupación se ha centrado en combatir la oxidación celular y la acción de los radicales libres. Por eso, términos como 'antioxidante' o 'anti-radicales libres' se han hecho cada vez más presentes dentro de la información.
El caso de nuestros perros es muy similar al nuestro: los animales también sufren el envejecimiento celular, sólo que en vez de manifestarse a través de arrugas o canas, lo hace a través de una serie de cambios en el organismo, tales como lesiones celulares o inhibiciones enzimáticas, procesos que merman sus defensas inmunológicas y algunas de sus funciones fisiológicas, aumentando la probabilidad de que se presenten enfermedades relacionadas con la vejez.
Acerca de la oxidación celular
Necesitamos del oxígeno para respirar. Por otro lado, este elemento es el responsable de la oxidación celular. El que inhalamos sirve mayoritariamente para producir energía para el organismo, pero un pequeño porcentaje produce radicales libres (RL). Éstos se forman de manera normal y habitual en el cuerpo al metabolizar el oxígeno.

Uno de los principales efectos de los radicales libres sobre el organismo es una alteración en los lípidos (grasas), dañando la membrana celular y pudiendo provocar la muerte de dicha célula o alteraciones desencadenantes del cáncer. El cuerpo produce naturalmente sustancias que previenen la formación de los radicales o los atrapan, evitando sus perjudiciales efectos. Estas sustancias son los antioxidantes.
Sin embargo, en determinadas situaciones, se forma una mayor cantidad de radicales libres, produciéndose un desequilibrio entre la cantidad de antioxidantes que el cuerpo es capaz de sintetizar y los radicales libres que se crean. Es entonces cuando existe un mayor riesgo de lesiones celulares graves.
El secreto de los bioflavonoides
El tratamiento contra el envejecimiento en animales debe estar orientado hacia la ralentización de los procesos biológicos típicos de la edad y a la supresión de las enfermedades geriátricas. Las vitaminas C y E llevan utilizándose desde hace tiempo, además de los carotenoides, el selenio, el zinc y el cobre. Últimamente, los alimentos están empezando a contar también con los denominados bioflavonoides o flavonoides.
Los flavonoides son un grupo de sustancias naturales, de origen vegetal y presentes en un gran número de alimentos, frutas y verduras principalmente. Las propiedades biológicas, farmacológicas y médicas de los bioflavonoides han sido extensamente revisadas.

El efecto antioxidante de los flavonoides radica en su acción captadora de radicales libres y en su habilidad para quemar metales, evitando así los efectos de éstos sobre las células: inhibición de enzimas, lesiones celulares, acciones mutagénicas cancerígenas... Pero además de esta importantísima función antioxidante, estas sustancias poseen otras funciones igualmente importantes para evitar o ralentizar el envejecimiento celular y mejorar la salud del animal.
Aliados del sistema inmune
El sistema inmunitario es muy sensible al proceso oxidativo. Las células inmunitarias requieren mayores niveles de antioxidantes que otras células dado que presentan un mayor riesgo de lesión oxidativa. Por ello, existe una relación entre malnutrición y problemas inmunológicos. Un animal que sigue una dieta pobre o que ha sido incorrectamente alimentado sufre más infecciones, enfermedades cardiovasculares, artritis y cáncer.
Si no se ingiere una cantidad suficiente de antioxidantes, pueden verse alteradas diferentes funciones inmunológicas. Numerosos estudios han observado que si se suplementa la dieta del animal con antioxidantes, mejora notablemente su capacidad a la hora de hacer frente a diferentes patologías. En cachorros que son alimentados con dietas suplementadas con antioxidantes, se ha observado un mejor estado inmunitario y una mejor respuesta a la producción post-vacunal de anticuerpos.
Múltiples beneficios
Es sabido que durante un proceso alérgico se libera histamina -sustancia responsable, entre otras, de picor, enrojecimiento, hinchazón, etc.-. Los bioflavonoides inhiben la liberación de la misma y el aumento de la permeabilidad de los vasos sanguíneos inducido por ésta, así como la reacción alérgica.

Igualmente, existen estudios que demuestran ciertos efectos anticancerígenos de algunos flavonoides. Éstos pueden ser debidos a la acción que ejercen dichas sustancias sobre el sistema inmunitario, mejorando las defensas naturales del organismo, o a su función antioxidante, combatiendo la acción mutagénica de los radicales libres.
Se ha descrito a los flavonoides como efectivos en la prevención y tratamiento de ciertas enfermedades hepáticas, así como en arritmias cardíacas u otras patologías del sistema cardiovascular. Por otra parte, una diabetes mal controlada puede provocar cataratas. En este sentido, los bioflavonoides pueden llegar a prevenirlas. Así pues, el empleo de antioxidantes en la dieta de nuestro amigo canino o felino cobra vital importancia para su buen estado de salud.


FLAVONOIDES Y BIOFLAVONOIDES


Fuente: http://www.medicinanaturista.com.ar/


Los flavonoides o bioflavonoides son pigmentos naturales presentes en los vegetales y que nos protegen del daño de los oxidantes, como los rayos ultravioletas cuya acción aumenta en el verano; la polución ambiental, con la presencia de minerales tóxicos, como el plomo y el mercurio; las sutancias químicas presentes en los alimentos: colorantes, conservantes, etc: como el organismo humano no puede producir estas sustancias químicas debemos obtenerlas de la alimentación o en forma de suplementos.

No son considerados por los nutricionistas como vitaminas, sin embargo los flavonoides actúan protegiendo la salud: limitan la acción de los radicales libres (oxidantes) reduciendo el riesgo de cáncer y enfermedades cardíacas, mejoran los síntomas alérgicos y de artritis, aumentan la actividad de la vit.C, refuerzan los vasos sanguíneos, bloquean la progresión de las cataratas y la degeneración macular, evitan las tufaradas de calor en la menopausia y combaten otros síntomas.

Afortunadamente, no son raros ni exóticos, se encuentran en muchas frutas y vegetales: están presentes en soja, té verde y negro, vino y como también pueden utilizarse en forma de suplementos nutricionales, junto con ciertas vitaminas y minerales.

Denominados vitamina P por su descubridor, el Dr.Alberto Stent-Gyorgyi (premio Nobel) los flavonoides existen desde que existen las plantas, pero no fueron reconocidos hasta 1930, año en que el Dr.Stent-Gyorgyi aisló de la cáscara del limón una sustancia, denominada citrina que regulaba la permeabilidad de los capilares. en que : pag 57,febr-mar-98

Los flavonoides no poseen las características de las vitaminas: no son aminas y conforman otro grupo químico, pero por su acción protectora y la imposibilidad del organismo humano de producirla merece ser incorporada al grupo de los nutrientes esenciales.



DIFERENTES TIPOS DE FLAVONOIDES

Se identificaron más de 5.000 pero los más estudiados son:

-citroflavonoides: quecitina, hesperidina, rutina, naranjina y limonene.

Quercetina es un flavonoide amarillo-verdoso que está relacionado con las respuestas alérgicas e inflamatorias; tiene efecto antiviral, antitumoral y antioxidante; es recomendado para el asma, inflamaciones intestinales (Sindrome del Colon Irritable), artritis y diabetes; los alimentos que los contienen son: cebollas, manzanas, brócoli, cerezas, uvas, repollo rojo y arvejas.

Hesperidina se encuentra en los hollejo de las naranjas y limones. Ayuda a fortalecer las paredes capilares en unión con la vit.C.

Naranjina: le dá el sabor amargo a frutas como la naranja, limón y toronja (gets the credit for most of grapefruit's bitter taste)

Limonene: aislado del limón y la toronja .



- flavonoides de la soja o isoflavonoides están presentes en las comidas preparadas con soja: porotos, tofu, tempeh, leche, proteina vegetal texturizada, harina, miso. Los dos más conocidos son: genisteina y daidzeina.

Genisteina bloquea el desarrollo de tumores; previene la formación de nuevos vasos por lo que impide la llegada del oxígeno y nutrientes a las células neotumorales. También actúa como un debilitador de estrógenos. Modula la reacción de los estrógenos ligándose a los receptores.A través de esta acción puede disminuir el riesgo de cáncer de mama; además disminuye los síntomas de menopausia, fibroides, enfermedad fibroquística de mama. Las personas que se alimentan en base a soja disminuyen los riesgos de cáncer de mama y de próstata

Draidzeina: su composición química es muy similar a una droga, la ipriflavona, que es usada para tratar la osteoporosis



- proantocianidina

son llamadas colectivamente proantocianidina oligómeros. Pueden ser absorbidos por las membranas celulares y progeterlas de los radicales libres. Tienen la ventaja de ser lipo e hidrosolubles: es decir, se disuelven en grasas (lípidos) o en agua. Por es,`en contraste con otros antioxidantes que no poseen esa doble cualidad, son capaces de atravesar la barrera hematoencefálica por lo que pueden proteger a las células cerebrales que son muy sensibles a las lesiones de los radicales libres.

Además combaten la inflamación y las alergias y aumentan la efectividad de las células defensoras del sistema inmunológico denominadas NK (natural killer)

Están en las semillas de uva, vino tinto y extracto de corteza del pino marino



- otras formas de bioflavonoides

-Antocianidina son pigmentos vegetales responsables de los colores rojo y rojo-azulado de las cerezas y berries; cuando son ingeridas protegen al tejido conectivo fortaleciendo al colágeno; también neutralizan los radicales libres y reducen la inflamación y el dolor.

- Acido ellágico: un flavonoide de las frutas (uvas) y vegetales que parece proteger los genes de los compuestos tóxicos

-Catecina y tanino: de acción antioxidantes, pueden estimular las enzimas detoxificantes; refuerzan los capilares, inhiben la inflamación y pueden bloquear el crecimiento de tumores; catecina parece proteger el hígado; el té verde y negro son buenas fuentes.

-Kaemferol y tanino tienen beneficios similares; kaemferol está en las frutillas, puerro, brocoli, rábano, endivias y remolachas rojas



Los flavonoides pueden hallarse en los siguientes extractos::

-Arandano: ayudan a las várices fortaleciendo la estructura de los capilares y venas; además se usa en ceguera nocturna y diurna y degeneración macular.

-Gingko biloba provee flavonoides que neutralizan los R.L.: pérdida de memoria, circulación jaquecas, degeneración macular, zumbido de oídos y sindrome de Raynaud

- Cardo Mariano: de él se extrae la silimarina: mejora la función hepática; protege al hígado de las toxinas ambientales.

-Crataegus es una buena fuente de antocianidinas y otros flavonoides; disminuyen la presión arterial por dilatación de los vasos sanguíneos, mejoran la función cardiovascular en caso de enfermedad cardíaca congestiva y reducen la angina de pecho.



Hasta donde sabemos los flavonoides son efectivos y sin contraindicaciones pero no sabemos las dosis ni lo que puede suceder con su utilización por largo tiempo

Lo mejor es absorberlos a través de la dieta: incluir varias porciones de vegetales (frutas y verduras) a lo largo del día; la utilización como suplemento nutricional o como fitoterapia debe realizarla el profesional .



OXIDANTES: aumentan la cantidad de radicales libres y provocan lesiones y envejecimiento en las células de nuestro oprganismo

Rayos ultravioletas procedentes del sol; agravado por la permeabilidad aumentada de la capa de ozono

Contaminación ambiental: por metales tóxicos: plomo, aluminio, mercurio, cadmio

Aditivos alimentarios: colorantes, saborizantes, conservantes, odorizantes.

Estrés y cansancio mental y físico: aumentan los requerimientos metabólicos y por consiguiente la oxidación.



ANTIOXIDANTES: nos protegen de la acción de los radicales libres

Vitaminas: C, E, B6, beta-carotenos

Minerales: selenio, zinc, manganeso

Bioflavonoides: citroflavonoides, isoflavonoides, proantocianidina