15.4.07

Xoloitzcuintle


El vocablo xoloizcuintle, xoloescuintle, xoloescuincle, soloescuincle o soloescuintle proviene del náhuatl xoloitzcuintli, de xolotl e itzcuintli perro.
Hay controversia entre el uso del vocablo xolotl para este caso. La Real Academia de la Lengua Mexicana le atribuye al término xolotl el significado de monstruo, convirtiendo el término literalmente en "monstruo-perro". Sin embargo, no debe de confiarse en esta academia para la definición de términos prehispánicos.
Otras fuentes atribuyen el término xolotl al dios azteca del mismo nombre. En la Mitología azteca, Xolotl es el dios de la vida y la muerte, y se creía que los xoloitzcuintles acompañaban a las almas de los difuntos cuando viajaban al Mictlan, el inframundo. Hay leyendas que hablan de que Xolotl le dio al xoloitzcuintle como regalo al Hombre, habiéndolo fabricado de una astilla del Hueso de la Vida, el hueso del que toda vida fue creada. Debido a esto era considerado sagrado por los aztecas.
Al Xoloitzcuintle también se le ha llamado Perro Azteca y "Perro Pelón Mexicano".

Son buenos perros de compañía y guardianes del hogar. Son muy inteligentes y activos. Vivarachos, deportistas y muy resistentes, les gusta trotar por espacios abiertos. Alegres, inteligentes, cariñosos y muy fáciles de educar. Son vigilantes con sus amos y sus propiedades. Muy desconfiado con los extraños y no son agresivos.
En cuanto a sus cuidados, la fina piel está expuesta a lesiones, pero las heridas y fisuras se curan rápidamente. No necesita cuidados del pelaje y sólo precisa a veces una ducha caliente. Es un perro fácil de educar. Igualmente hidratarlo constantemente. Una ventaja obvia es que no causan problemas a la personas con alergia al pelo de los perros.
Son perros diferentes a lo común, su apariencia sin pelo puede resultar "chocante" para muchas personas, por eso mismo no son para quienes que gustan de lo tradicional. En resumen son excelentes mascotas dignas de cohabitar con alguien que les destine el tiempo y cuidados que necesitan.
http://es.wikipedia.org/wiki/Xoloitzcuintle
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Se han elaborado diferentes teorías y leyendas sobre el origen del xoloitzcuintle, algunas de las cuales pueden sonar incluso inverosímiles, pero para evitar todo este tipo de conflictos hemos de decir que sin lugar a dudas el perro ha existido en mesoamérica —y hablamos de México principalmente— por lo menos desde hace 1 300 años; todo esto según datos antropológicos obtenidos por el Dr. Raúl Valadéz Azua, quien examinó y verificó varios esqueletos hallados en diferentes sitios arqueológicos —Teotihuacan por ejemplo— , con lo cual podemos eliminar hipótesis basadas en la importación de perros por los conquistadores españoles o por los chinos al puerto de Acapulco; de hecho, es asombroso que estos animales pudieran sobrevivir sin ningún tipo de cuidado humano para mantener pura la raza, es decir, para sobrevivir tuvieron que cruzarse con otros perros con pelo y sin embargo siempre se transmitía a parte de la progenie el gen de la atriquia o falta de pelo, logrando sobrevivir durante cientos de años sin intervención del ser humano.
Cuando al fin nos damos cuenta de que poseemos una raza autóctona con cualidades que no son comunes en los demás perros, resulta que ésta se encuentra en peligro de extinción, y para colmo son una partida de extranjeros quienes se dan a la tarea de realizar el rescate del xolo en los años cincuentas. Cabe mencionar al Sr. Norman P. Wright, a la Condesa Las celles de Premio Real, al Sr. Lyman Chandler, al Sr. Fernando Kracowiser y otras más a quienes debemos el poseer todavía esta raza. Actualmente si todavía no es común ver un xolo en las calles de la ciudad de México, sí podemos mencionar que existen varios criadores y ejemplares con los cuales se está restableciendo poco a poco la raza y asentando cada vez más en todo el país y algunas partes en el extranjero como Inglaterra, Francia, Holanda, Suecia y E.U.A.; aunque todavía es común oír a los mexicanos decir "¡qué perro tan feo!", mientras los extranjeros mencionan "¡qué perro tan raro!".
Hoy se ha reformado el estándar oficial de la raza emitido por la FCM y avalado por la FCI, en el cual se admiten tres tallas; la primera es el estándar que es la mas conocida y tiene una alzada a la cruz -donde se cruza la columna vertebral con los hombros- de 46 a 55 cm, permitiendo en algunos ejemplares de excelente conformación hasta los 60 cm; sigue el intermedio con una alzada de 36 a 45 cm y por último el miniatura con una alzada de 25 a 35 cm a la cruz. El Xoloitzcuintli Club of America en E.U.A. reconoce para registro y exposición aparte de las tallas antes mencionadas a dos variedades que son el xolo sin pelo y el xolo con pelo; esto lo hacen con el fin de evitar que se sacrifiquen los animales con pelo, ya que se considera un defecto grave. En la FCM no se admite el registro de ejemplares con pelo, por lo que recomendamos que los ejemplares con esta característica sean castrados, esto es con el fin de evitar que se reproduzcan y transmitan este gen pues el objetivo primordial es obtener una descendencia lo más pura posible -camadas con un 100% de ejemplares sin pelo- , ya que aún cuando se trata de un gen homocigótico recesivo semiletal -esto quiere decir que son animales con características adversas a la naturaleza, pues el pelo protegería contra las inclemencias del tiempo, las piezas dentarias completas le servirían para desgarrar y triturar la comida, y el timo intervendría en la defensa del sistema inmunológico del cuerpo. Estas características les disminuyen las probabilidades de sobrevivir— por lo general se logra un 75% de la camada.
La gente se refiere a los xolos como animales "terapéuticos", y he de mencionar que poseen la misma temperatura que cualquier perro -38 a 39°C. Al tocarlos los sentimos calientes, pero si rapáramos un perro con pelo sentiríamos lo mismo. Lo terapéutico quizás se deba al hecho de que aquellas personas que con el frío y artritis sienten dolor, cuando ponen sus manos en contacto con la piel del animal sienten alivio al elevarse parcialmente su temperatura por vasodilatación -recordemos que la temperatura normal en un humano es de 36-37°C.
Por otro lado el Dr. Raúl Valadéz afirma que al examinar los restos antropológicos en varias zonas arqueológicas ha determinado que sí se utilizaban los xolos como alimento y también como ofrenda. La posibilidad de comer perros dependía del estrato social y del alcance económico de cada individuo. Como anécdota he de referir que hace algunos años tuve la oportunidad de conversar con un colega que mantenía cinco de estos perros en su rancho y siendo investigador entre otras muchas cualidades que posee, sacrificó y preparó dos de sus xolos como si fueran carnitas de cerdo, yo horrorizado -más no por ello dejé de sentir curiosidad- le pregunté qué sabor tenían , a lo cual respondió que tenían un sabor exquisito y que el chicharrón obtenido de ellos era más delgado y libre de grasa, más palatable. Espero que todo mundo crea esta historia y nos abstengamos -por lo menos de mi parte pueden estar seguros- de comprobar esta aseveración. También se utilizan supuestamente los xolos para curar el asma, pero la verdad es que la fracción proteíca del pelo es lo que ocasiona las reacciones alérgicas y que estornudemos, así que al carecer de éste -y algo de influencia psicológica- las reacciones alérgicas son mínimas o nulas.
Vale la pena mencionar que el xolo no es la única raza de perro desnudo que existe en el mundo; también están los perros crestados chinos, el pila argentino, el perro desnudo del Sahara, el terrier desnudo, el perro orquídea peruano, etcétera. Sin embargo el xoloitzcuintle es hoy por hoy la raza de perro desnudo que más difusión tiene en el mundo.

MVZ PTPA Hugo Paul Hernández Montaño