3.3.06

El golpe de calor: qué es y cómo actuar




Los animales homeotermos (mamíferos y pájaros) pueden sobrevivir en un entorno con amplias variaciones de la temperatura ambiental. Sin embargo, necesitan mantener constante la temperatura de sus tejidos profundos. En casos extremos, el sistema de termorregulación puede ser insuficiente, produciéndose lesiones celulares e incluso la muerte. Se trata de una verdadera urgencia que precisa de un descenso rápido y controlado de la temperatura así como acudir urgentemente al veterinario, aunque parezca que el animal se recupere.

Cuándo se origina el golpe de calor
El golpe de calor aparece en los periodos de calor intenso. Es más frecuente cuando el grado de humedad relativa es elevado. El caso más conocido es el que se produce en los perros encerrados en el interior de un vehículo. También son frecuentes cuando el suelo de las jaulas es de cemento y los animales no disponen de sombra, así como en las habitaciones pequeñas y mal ventiladas. Comparando las especies caninas y felinas se observa que, generalmente, el gato soporta mejor el calor que el perro. No pueden indicarse valores absolutos de temperatura ambiente a partir de los cuales se origine este síndrome. La razón es que existen factores ambientales e individuales, distintos de la temperatura ambiente, que favorecen la expresión clínica del golpe de calor.

FACTORES AMBIENTALES
Higrometría
Uno de los principales mecanismos de lucha contra el calor que tienen los carnívoros domésticos es la eliminación de vapor de agua por las vías respiratorias. El grado de humedad elevado limita este mecanismo de termorregulación. Por lo tanto, la ventilación del local done se encuentra el animal juega un papel muy importante. Los movimientos del aire favorecen el descenso de la humedad y la eliminación de calor.

FACTORES INDIVIDUALES
Edad
Los animales jóvenes y viejos soportan peor el calor.

Raza
Los animales braquicéfalos son más sensibles al calor por su dificultad respiratoria.

Obesidad
La piel de los animales obesos tiene un mayor poder aislante.

Pelaje
El pelaje espeso disminuye la eliminación de calor. Sin embargo, protege de los rayos solares, siempre que exista suficiente ventilación.

Color de la capa
Los animales de capa oscura absorben más calor.

Digestión
Después de las comidas se incrementa la temperatura corporal. Durante el verano es preferible alimentar a los perros al finalizar el día.

Agua
La privación de agua favorece la deshidratación. Es conveniente que el animal disponga siempre de agua fresca.

Enfermedades
La insuficiencia cardiaca, respiratoria y el estrés debilitan los medios de lucha del animal contra el calor.

Ejercicio
El ejercicio muscular produce gran cantidad de calor.

Qué podemos observar
Los síntomas clínicos del golpe de calor aparecen habitualmente cuando la temperatura interna supera los 42ºC. La rapidez de evolución de los síntomas depende de la intensidad del calor soportado y, sobre todo, del tiempo que el animal está expuesto a esta situación. La forma aguda clásica tiene una evolución muy rápida. La muerte sobreviene en 24 horas, por depresión y posterior parada respiratoria. Las lesiones inducidas por el calor son multifocales. En el caso de supervivencia del animal a un choque térmico agudo, debe mantenerse es vigilancia estricta por parte de su veterinario. Los choques de evolución retardada ocasionan frecuentemente insuficiencia hepática o renal.
El pronóstico se agrava si observamos petequias o alteraciones gastrointestinales hemorrágicas. Las formas menos graves tienen un mejor pronóstico. Observamos astenia, temblores musculares y cianosis. En los perros de caza observamos tirones en los músculos de las extremidades.
El tratamiento del golpe de calor se basa, fundamentalmente, en la lucha contra la hipertermia y la evolución del estado de choque.

Medida urgente: descenso de la temperatura corporal
La primera medida que debemos adoptar es enfriar el cuerpo del animal. El objetivo es mantener la temperatura corporal a 39ºC.
Se han utilizado y comparado distintas técnicas de refrigeración. La más eficaz consiste en sumergir al animal en agua a 20ºC.
No debemos usar agua muy fría, debido a que limita la transferencia de calor al inducir vasoconstricción refleja y temblores. Si mojamos al animal podemos utilizar un ventilador para acelerar la transferencia de calor. En los perros es conveniente aplicar hielo en las axilas e ingles. De esta forma enfriamos rápidamente el sector circulante.
Los enemas y lavados gástricos con agua fría no aportan ninguna mejora. Además, el enema tiene el inconveniente de impedir la medición posterior de la temperatura rectal. Su veterinario vigilará constantemente la temperatura rectal con objeto de conocer la eficacia de las medidas adoptadas y evitar que se instaure una hipotermia.
Recuerde: acudir de inmediato al veterinario, el profesional actuará de forma correcta para:
1. Corregir adecuadamente la hipertermia.
2. Tratar el estado de choque y el edema cerebral.
3. Vigilar la evolución: peligros serios.
4. Intentar salvar la vida del perro y evitar secuelas.

En las Exposiciones Caninas donde predomina el calor recomendamos el uso de ventiladores, un suministro continuo de agua fresca (podría diluir algún hidratante como suero oral líquido o en polvo, consulte con su Médico Veterinario), si el cuidado del pelo lo permite usar toallas livianas mojadas para cubrir al ejemplar .
Algunos expositores colocan hielo en el agua (no nos consta si eso puede ser beneficioso o no)