24.8.06

Embarazo Psicológico o pseudopreñez





¿Enfermedad o mecanismo de defensa?









Dr. Héctor Quintana
Dr.Guillermo O. González
http://www.nutrihelpanimal.com.ar


La gran familia de los cánidos lograron desarrollarse, reproducirse y poblar el mundo adaptándose a diferentes climas y regiones geográficas a partir de un comportamiento comunitario.
Los caninos en sus orígenes poseían menores capacidades para la caza que los felinos, reconocidos como los "grandes cazadores naturales", los cuales eran (y son actualmente sus descendientes) carnívoros estrictos, con sus mandíbulas y dientes muy bien adaptados para la captura de las presas, de hábitos solitarios, no solían formar familias y los machos buscaban a las hembras solamente para reproducirse. Nuestros queridos gatos domésticos actuales, mantienen las mismas características y hábitos que sus ancestros. Mientras que los caninos, que poseen diferente composición dentaria, su comportamiento alimenticio es un poco más omnívoro, se adaptaron a diferentes dietas y, puesto que no poseían la fortaleza y vigor de los grandes felinos debieron adecuarse a otras condiciones.
¿Cómo lograron sobrevivir?
Lo hicieron, gracias a lo que todos los hombres del mundo deberían hacer cuando las condiciones del medio ambiente son desfavorables (ambientales, sociales o económicas), ¡uniéndose!, como bien lo dice el Martín Fierro "los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera..." y los caninos se unieron formando grandes familias (jaurías), compartiendo todas las actividades, especialmente la caza en grupos (lo que se observa en la actualidad en los lobos). Además, al vivir en forma gregaria se organizaron jerárquicamente para compartir la comida, la defensa del grupo familiar y el cuidado de sus crías.
Es aquí donde comienza a explicarse un fenómeno de aparición bastante común en nuestros días, el que se denomina "lactación de la pseudogestación", "lactación nerviosa" o la vulgarmente conocida "pseudopreñez o falso embarazo". Este fenómeno no es en sí mismo una patología o enfermedad, sino que más bien, es un atavismo heredado de sus ancestros cuando vivían en jaurías, afectando especialmente a las hembras de menor rango jerárquico, las cuales podían entonces servir de nodrizas en caso de muerte o de insuficiencia láctea de las perras dominantes, permitiendo el amamantamiento de los cachorros huérfanos.
¿Cómo diferenciar una pseudopreñez?
En la "pseudogestación" o "embarazo nervioso" de las perras afectadas se observan los mismos síntomas y las mismas variaciones hormonales que en las hembras preñadas. Se producen cambios en el comportamiento, las perras comienzan a reunir diversos objetos para hacer un nido, aumentan de peso e incluso comienzan a secretar leche por las mamas, haciendo muy difícil el diagnóstico diferencial entre una gestación verdadera y una pseudogestación, guiándose solamente por estos signos.
Esta alteración no despierta una llamada de atención por parte de los dueños de las mascotas hasta que comienza a observarse el síndrome de lactación nerviosa, el cual generalmente es motivo de consulta al veterinario, donde se manifiesta una inflamación de las mamas, con secreción de leche, excitación y frecuentes lamidos, los cuales mantienen la continuidad de la lactación por un reflejo neurohormonal semejante al que se produce naturalmente cuando los cachorros se están amamantando.
¿Cómo debemos actuar ante esta situación?
El tratamiento, que debe estar controlado por el profesional veterinario, consistirá básicamente en la administración de hormonas antiprolactínicas, en la reducción de la ingesta hídrica (menor consumo de líquidos) y, según el cuadro presentado, la aplicación local sobre las mamas de cremas astringentes o de paños fríos con vinagre de alcohol, evitando el masaje de los pezones por parte del dueño durante estas maniobras e impedir que la perra se lama los pezones colocándole un collar especial denominado genéricamente "collar isabelino" para interrumpir el mantenimiento de un "círculo vicioso" (retroalimentación positiva) que perpetúe el estímulo de lactación.
Causa extrañeza comprobar que este fenómeno se produce más comúnmente en las perras hogareñas, en las cuales existe un gran apego y sumisión a sus amos, que en las de los criaderos, siendo desconocido el motivo de estas diferencias, postulándose que en los criaderos, las hembras son servidas a temprana edad y estén preñadas durante casi todo su ciclo reproductivo o quizás influyan otros factores ambientales y conductuales no determinados.
Es habitual que en las perras predispuestas, la ocurrencia de estos trastornos se repitan en cada ciclo sexual y, aunque estas hembras se preñen, pueden volver en ciclos posteriores a recidivar (repetir nuevamente el cuadro de pseudogestación).
El único tratamiento definitivo que evita las recidivas es la ovariectomía (extirpación quirúrgica de los ovarios), el cual impide, lógicamente, los riesgos de preñeces (deseadas o no) y además disminuyen los riesgos de ocurrencia de tumores mamarios hormona-dependientes.